El músico estadounidense se sincera en unas páginas llenas de palabrotas y ternura.
“Siempre pensé que necesitaba cosas como colocarme con mis negratas, un Bugatti […] o unas zorras con el culo grande para ser creativo. Pero cuando me quitaron todo eso, mi creatividad pasó el último test”.
Este es uno de los fragmentos de Gone ‘Til November, el libro de memorias en que el rapero Lil Wayne habla de su experiencia en la cárcel.
El libro —que se publicará la semana que viene en EEUU— fue escrito como un diario durante la experiencia del músico en prisión, donde pasó 8 meses en 2010 por posesión de armas.
En él, Wayne habla de todo lo que se le pasa por la cabeza: la gente que conoce en la cárcel, sus planes, los amigos que lo visitan (entre otros, Kanye West, Drake y Diddy), su familia…
Algunas de las cosas que relata en Gone ‘Til November impactaron mucho al propio Lil Wayne, y cambiaron la forma en que vemos al rapero.
Por ejemplo, en un momento del libro Wayne cuenta cómo decoraron la cárcel para la boda gay entre dos presos. Decidieron colgar papel higiénico de las paredes y brindaron con Gatorade, “el oro líquido en el talego”: “imagínate ver a putos tíos usando pañuelos de papel como decoración de boda. Y uno de ellos es Lil Wayne. MUY loco“, dice él mismo.
Algunas de las cosas que relata en Gone ‘Til November impactaron mucho al propio Lil Wayne, y cambiaron la forma en que vemos al rapero.
Otro episodio interesante de los diarios es cuando se entera de que Drake se ha acostado con su novia, según le contó el propio cantante de “Hotline Bling” en una visita a la prisión: “enterarme de que ella se había tirado a Drake fue lo peor. Drizzy vino a verme y fue como, “Sí, es verdad”. ¡Mierda! Esta es la típica basura que no quieres oír cuando estás en el trullo”.
Pero el momento más divertido de Gone ‘Til November es, posiblemente, aquel en que Wayne cuenta cómo una amiga suya fue a visitarlo para “hacer un instinto básico”.
Como los guardias de la prisión realizan siempre una detallada búsqueda de drogas por todo el cuerpo de los visitantes , se dieron cuenta de las intenciones que tenían Wayne y la chica y la obligaron a ponerse unos calzoncillos nuevos que le llevaba a Wayne un amigo.
Lil Wayne nunca usa dos veces la misma ropa interior
Porque Lil Wayne nunca usa dos veces la misma ropa interior, como también hemos aprendido en sus diarios de la cárcel.
En resumen, Gone ‘Til November quizá no te enseñe cómo evitar la prisión. Pero, desde luego, te enseña cómo partir la pana si ya estás dentro.
“Solo podía pensar en que cada paso que daba me alejaba de todo lo que yo quería. ¿Y hacia dónde? Hacia un mundo de disfuncionalidad, desconfianza y falta de respeto. Entonces me dije, bueno, esto es como el mundillo de la música solo que sin groupies”.
Fuente: playgroundmag