El embarazo de Melanie Pritchard se desarrollaba como estaba previsto, los médicos no observaron ningún tipo de complicaciones. Sin embargo, cuando llegó el momento del parto, la situación se descontroló, — Melanie comenzó a convulsionar. Los indicadores en los monitores comenzaron a “saltar”, y los médicos declararon una señal de emergencia, Melanie fue trasladada a la sala de cuidados intensivos.

Resultó que la mamá tenía una embolia del líquido amniótico, y ella murió …

Su marido Doug contó que según los indicadores clínicos su esposa estaba muerta, cuando dio a luz a su hija. “Mi primer pensamiento fue — ahora soy un viudo. Y sólo llevamos 3 años de casados… ”

Los médicos le pidieron al esposo que se despidiera de su esposa. Doug recuerda que le murmuró lo siguiente: “¡Si todavía tienes fuerzas, al menos algunas, lucha!”

Lo único que le quedaba a Doug y a sus familiares, — era orar. Los médicos concentraron sus fuerzas para reanimar la vida de Melanie. No había noticias positivas… Después de un tiempo llegó el hermano de Melanie que es médico.

El hermano encontró una hemorragia interna, y los médicos se apresuraron en operar a la mujer. Los familiares tenían alguna esperanza. ¡Y después de las 24 horas Melanie se despertó!

Cuando ella abrió los ojos, Doug le mostró una foto de su hija que milagrosamente sobrevivió. Pero la vida de Melanie estaba todavía al borde. Los médicos informaron que ella necesitaría un trasplante de corazón o pulmón.

Incluso si Melanie sobrevive, tendrá serios problemas neurológicos. Pero Doug no se desesperó.

Varias horas más tarde, Melanie ya respiraba por sí sola. ¡Ocurrió un milagro y después de una semana la familia ya estaba en casa, y Melanie no tenía ninguna complicación!

Mucho tiempo Doug no podía creer en su felicidad: “¡Es un milagro! ¡Que Melanie sobrevivió, fue un milagro! Me parece que Dios escuchó nuestras oraciones”.

Fuente: perfecto.guru