Mira tu vida en este mismo momento. ¿Sientes que algo anda mal? ¿Tal vez no puedes encontrar la motivación o tomar la decisión correcta?
La respuesta a este tipo de preocupaciones, de hecho, está en la más mundana de las cosas. La forma en la que enfrentas tu rutina diaria muestra mucho sobre cómo lo haces con todo lo demás.
Una solución sencilla
Cuando estaba en la universidad, mi habitación era un desastre total, así como lo era mi vida también. Yo estaba deprimido casi siempre. No me importaba que hubiera orden a mi alrededor y, por lo tanto, el caos afuera lentamente se convirtió en un caos dentro de mí.
El día en que decidí que no podía aguantar más el desorden, empecé a trabajar en él. En primer lugar, limpié mi habitación y la oficina. La decisión fue espontánea, pero creo que así es como se nos ocurren todos los pensamientos correctos en la vida.
Esta simple acción dio inicio a mi nuevo estilo de vida. No puedo decir que la limpieza diaria me haya cambiado, pero al menos empecé a hacerlo. Me hizo ver la falta de claridad en mi vida, y por fin comprendí qué es lo que quería y sentía de verdad.
Cuando tu mente está en caos, esto se refleja en el exterior. Por lo que es muy lógico que si cambiamos nuestros hábitos, también seremos capaces de ordenar toda nuestra vida.
Cómo se aplica en otras áreas de tu vida
Ahora que estaba cuidando mi rutina diaria, mis hábitos se expandieron a mi trabajo, la comida e incluso mi estado de ánimo. Empecé a vivir de forma saludable, dejé atrás a la gente me arrastraba hacia abajo, dejé la universidad que odiaba, y empecé a hacer las cosas que me interesaban de verdad. Todo esto me dio libertad. Todo se normalizó y sentí como si mi mente hubiera pasado por una limpieza general también.
Así es como puedes empezar a actuar
Echa un vistazo a tu vida como si se tratara de una habitación desordenada. ¿Qué es lo que no te gusta? ¿Está todo en su lugar? ¿Hay alguien o algo que te impide cambiar? ¿Hay cosas que te gustaría hacer pero no las estás haciendo? Cuando hayas respondido a estas preguntas, empieza a limpiar.
Suele ser útil comenzar con algo sencillo como simplemente tirar basura vieja o las cosas que no te sirven. ¿Sentiste alivio en tu corazón después de hacerlo?
Removiendo obstáculos
A continuación, determina los obstáculos que te impiden avanzar: la falta de conocimiento, el miedo, la ansiedad o incluso algunas personas que conoces. Haz una lista de estas cosas, verás que te ayudará notar cuáles son los obstáculos en realidad. Anota varias soluciones posibles para cada problema.
Sabes cómo hacer frente a cualquier problema, sólo acéptalo. El miedo, la pereza y la debilidad son todo lo que nos impide hacer eso, ¡así que haz una limpieza general de tu vida y sigue adelante con ella!
Fuente: genial.guru